Humanidad

Sobre el maltrato a los animales, de los que hay casos muy sangrantes y elocuentes, (incluidas las corridas de toros tan vinculadas a nuestras tradiciones más ancestrales) He tenido la ocasión de conocer la horrible mal llamada tradición de la matanza del toro de la población de Tordesillas.
No voy a entrar en más detalles, en internet hay información de sobras, tanto de detractores como de defensores. Cada uno que saque sus propias conclusiones.

La mía es que este mundo está bastante enfermito, que si hay alguien que justifique el hecho de acosar a un pobre animal (por muy toro y bravo que sea) atravesándolo vivo con lanzas,aunque eso sí, con cuidado de mantenerlo con vida el tiempo suficiente para que pueda atravesar no sé que puente en homenaje a la Virgen ( temblando debe estar la pobre cada vez que se acerca septiempre) para luego matarlo y hacerse con sus testículos como trofeo, estamos malitos de verdad. No iba a entrar en detalles, pero no he podido evitarlo.

Pienso también en la irresponsabilidad de dejar perros abandonados a su suerte, sin pensar en su sufrimiento, o en la posibilidad de sufrir un accidente, o de provocarlo, a veces con el bozal puesto, con lo cual mueren de simple inanición, y sigue...

Son seres indefensos,aunque a veces no tanto, pero que en todo caso hemos logrado dominar con nuestro raciocinio, y la condición de seres humanos nos debería hacer ser responsables de ellos, no verdugos ni torturadores.

Debe de haber de todo, irresponsabilidad, inconsciencia, ansia de poder, sadismo, ignoracia, que se yo...

Esto es de momento, más adelante plantearé dudas existenciales que tengo y que estaría muy muy agradecida de que alguien me pudiese aportar su punto de vista al respecto.

Protectora

En estos días de cambio de empleo y nuevas relaciones, he tenido la ocasión de conocer a personas muy implicadas en la defensa de los animales. De entrada tienen todas mis simpatías y no se si llegaré a ese grado de implicación.

En todo caso estoy en ello, de momento he localizado la web de la Protectora de animales de Barcelona, como todas las de su género hacen una gran labor y hay muchas maneras de colaborar. Hay muchos bichitos necesitados de cariño y dispuestos a darlo.

Esta es la dirección:

http://www.protectorabcn.com/

Hay mucho que hacer al respecto.

Betancourt

Sigo con interés las noticias referentes al secuestro y la posterior liberación de la política colombiana. Una de las primeras referencias que tuve de ella fue la de la famosa fotografía de aquella mujer avejentada, enferma y con la mirada baja, sentada en una especie de mesa picnic selvática, sosteniendo en sus manos un recipiente ( vaso o botella, no lo recuerdo) y con aquel manto de cabello negro larguísimo que daba la impresión de que se nutría de la poca energía que le quedaba.

Pasaba yo por una época de desintoxicación de noticias y noticiarios y alejada de la actualidad,así que no sabía detalles, fué a partir de su liberación que retomé el hilo de las noticias en general y de esta en particular.

En primer lugar y debates políticos y morales aparte, llama la atención el profundo cambio operado en esta persona, sus fotografías antes del secuestro,eran las de una mujer bella y llena de vitalidad, valiente, atrevida, demasiado quizás, que no tenía pelos en la lengua a la hora de denunciar corruptos y corrupciones, que se rebelaba, que no cedía, y de cómo la han castigado.

Porque ella se sostiene en sus ideas, en sus principios y hace manifestaciones, y reivindica el hecho de que todavía hay rehenes, que la cosa no ha terminado, pero ahora es más prudente, hace un llamamiento para una manifestación en Colombia a la que no acudirá, declara que se debe a su familia, sus hijos, toda la gente que la apoyado y ha sufrido por ella, el tiempo dirá si es un cambio de estrategia en su carrera política o el principio del fin de ésta, y como mucho quedará en referente testimonial, observadora política en la distancia.

Hay quien dice que se lo buscó, yo creo que se lo encontró, que la vida cotidiana de esta persona estaba tan imbuida en su lucha y sus ideales que no pensaba en nada y nadie más, ni en ella misma ni en los dos hijos entonces pequeños que ya tenía.

Y no es que sea justo, no lo es, pero es la triste realidad, si en esta vida se castiga duramente el hecho de ser una persona de principios y librepensadora a niveles de la más anodina cotidianeidad, el hecho se multiplica por infinito a niveles de poder político, social o económico, en el pais de Betancourt y en el de cualquiera, seamos realistas.

Juegas ateniéndote a las reglas o te retiras, machacas o te machacan, dualidades, planteamientos existenciales que tarde o temprano se plantea la persona en el momento que es consciente de la realidad de la vida. Eliges, te decantas, y comienzas a actuar, y toda acción tiene consecuencias comenzando una maraña de compromisos, deudas y chantajes propios y ajenos que nos hacen sentir atrapados y sin salida, en un túnel que sólo nos permite ir hacia adelante, a pesar de no ver luz al final.

Creo que ante todo esto es muy necesario que pensemos que siempre estamos a tiempo de rectificar y que todo, absolutamente todo en esta vida tiene solución, el fatalismo sólo nos lleva a ahondar más en nuestros errores, sopena de estar cada vez más desgastados y agotados y menos preparados para empezar de nuevo, para replantearnos nuestra existencia.

Y sé muy bien de lo que estoy hablando.

Besos fraternales.

Londres

Hace pocos días estuve en Londres, en unas mini-vacaciones de todo lo que habitualmente me rodea. A punto estuve de no ir, pues la reserva la había hecho hacía tiempo y las circunstancias o más bien las perspectivas habían cambiado en el ámbito laboral y visto de una manera objetiva no era el mejor momento para viajar a una capital tan terriblemente cara, aún quedaba por pagar el hotel y la estancia, aunque los billetes de avión ya no se podían devolver.

Total que a última hora y cuando todo descartado y animada por personas que de vez en cuando me hacían algún atisbo de demostración de genuino afecto y sin apenas haber preparado nada, me fuí a Londres para el puente de San Juan.

No me arrepentí, a pesar de la para mí pequeña fortuna que me cobraron por el hotel (había anulado la anterior reserva en uno más modesto y decidí ir a otro de superior categoría, no estaba el ánimo para sordideces) las dificultades con mi limitado inglés y el robo en toda regla de la que fuí objeto (por incauta) en una oficina de cambio de moneda en Notting Hill, la experiencia fué muy positiva.

Fuí sola, no lo he mencionado pero se deduce por la primera persona del singular que vengo usando en el texto. Era la segunda vez que lo hacía a un país extranjero y me esforcé en que no fuera un impedimento para disfrutar del viaje. Claro que me hubiera gustado viajar acompañada y compartir mis experiencias con personas afines. Pero no siempre es así, a veces hay que aguantar verdaderos incordios, tampoco puedes observar con tanta atención lo que ocurre a tu alrededor cuando vas charlando con alguien, también es cierto que cuatro ojos ven más que dos, y seis que cuatro, etc... Pero ya se sabe, quien no se consuela es porque no quiere.

Tiempo al tiempo

Tiempo al tiempo y más de un año después de la última entrada y previo repaso al limbo de los borradores, héteme aquí en el universo de los blogs.

Leo y me horrorizo. ¡Cuantos principios traicionados! ¡Cuanta reflexión acertada que luego no es tenida en cuenta a la hora de actuar!

He vivido, he sufrido, he aprendido, creo que lo he llegado a asimilar y que mis acciones de ahora son más consecuentes con mis principios y mis conclusiones, pero todavía queda por sufrir, porque ya tengo claro lo quiero y lo que soy, una buena persona, inteligente, intuitiva y consecuente con sus ideas.

Esto no es poco y el camino está trazado y la senda es dura, no es fácil para el mundo aceptar una persona de mis características, máxime cuando el aspecto físico no es lo que se dice convencional.

Mucha gente toma el camino fácil, incluso algunas se logran autoconvencer que no hay otro posible, el de la manipulación, la mentira, el chantaje moral, el de la participación activa en asedios y linchamientos y en la maldad puesta en práctica sin consideración, porque a esta persona le tengo ganas, o porque si no lo hago me lo harán a mí.

Claro que sabía que en el mundo había perversidad, lo que no tenía ni idea es que fuese tan generalizada, y no soy partidaria de mensajes negativos, pero la realidad está ahí, a la orden del día, en todos los ámbitos de la vida, ya no se va de frente, esto crea conflictos, problemas y responsabilidades, es más fácil la puerta de atrás.

Y es que la mayoría de las veces no sé para que se toman tantas molestias si con hablar las cosas sinceramente se arreglarían ipso facto, lo único que sacan es dañar a la persona, ahogar su espíritu, y eso ¿de que le sirve a nadie? Se lo que se hace, pero en la mayoría de los casos no se porqué y porqué de ese modo.

Mucha información concentrada, me temo, pero es lo que hay.

Saludos.